domingo, 27 de octubre de 2013

Determinantes de un Adecuado Crecimiento

El crecimiento es un proceso complejo donde interactúan muchos factores, entre ellos, factores genéticos y ambientales. Definitivamente el principal determinante de cuanto vamos a crecer es la genética. Sí somos hijos de padres altos seremos altos, si somos hijos de padres bajitos, también seremos bajitos. El siguiente determinante importante es tener una buena nutrición. Si tenemos una alimentación sana y balanceada, con la suficiente cantidad de proteínas, se logrará alcanzar nuestro máximo potencial de crecimiento, si no, tendremos una talla baja. La desnutrición sigue siendo una causa importante de talla baja en México y muchos otros países en vías de desarrollo o subdesarrollados. El tener un óptimo estado de salud, o la ausencia de enfermedades importantes que pudieran retrasar la velocidad de crecimiento, como enfermedades pulmonares (asma por ejemplo), enfemedades cardiacas, enfermedades renales, enfermedades neurológicas, etcétera, también tendrán influencia sobre nuestra talla final. Por ultimo, el dormir bien, y el ejercicio en forma regular serán otros determinantes para conseguir un crecimiento adecuado. Si no se duerme bien no habrá una secreción adecuada de hormona de crecimiento, ya que ésta se secreta principalmente en la noche, en los periodos de movimientos oculares rápidos o sueño profundo. En cuanto al ejercicio, éste es un potente estimulador de la secreción de hormona de crecimiento. Así que nuestra estatura final será determinada por nuestra genética, una buena alimentación, un buen estado de salud y dormir bien y hacer ejercicio.

miércoles, 16 de octubre de 2013

Resistencia a la Insulina: La Raíz de Todos los Males

La insulina es una hormona maravillosa que no sólo se encarga de mantener nuestros niveles de glucosa dentro de rangos normales, sino que además tiene propiedades anti inflamatorias y anti oxidantes. Por lo tanto, cuando se desarrolla una resistencia a la insulina, que es una disminución en la sensibilidad de nuestro cuerpo (particularmente del tejido adiposo y muscular) a la acción de la hormona, empieza a alterarse el metabolismo de los carbohidratos (lo cual nos llevará a desarrollar una diabetes mellitus tipo 2), y empiezan a incrementarse tanto la actividad inflamatoria (con producción de una gran cantidad de sustancias dañinas a nuestro organismo), como la actividad oxidativa, con producción de una gran cantidad de radicales libres de oxígeno y superóxido que invariablemente dañaran a nuestro cuerpo, especialmente al tejido vascular. La resistencia a la insulina no sólo es el origen del desarrollo de diabetes mellitus tipo 2 sino que también es la causa de enfermedades como el síndrome de ovarios poliquísticos en mujeres, del desarrollo de dislipidemias que nos llevarán a ateroesclerosis, de enfermedades cardíacas como infarto del miocardio (ataques al corazón), y del desarrollo de hiperuricemia y gota. También contribuye al desarrollo de hipertensión arterial a través del aumento de la actividad de una sustancia llamada dimetilarginina asimétrica. Esta sustancia diminuye la acción de otra enzima llamada sintasa del óxido nítrico, lo que produce una reducción en la producción de óxido nítrico que dará lugar a un aumento en la reactividad de los vasos sanguíneos y a un aumento subsecuente en nuestros valores de presión arterial. Ahora se darán una idea de porque la resistencia a la acción de la insulina es la raíz de todos los males, ya que es el origen de la mayor parte de las enfermedades (diabetes y enfermedades cardiovasculares), que son líderes como causa de muerte en México y en todo el mundo.

domingo, 6 de octubre de 2013

Deficiencia de Hormona de Crecimiento y Alteraciones del Sistema Nervioso Central.

Existe evidencia en estudios clínicos que demuestran que los niños con deficiencia de hormona de crecimiento, y sin tratamiento, tienen alteraciones en el desarrollo de su sistema nervioso central. Estudios de resonancia magnética demuestran una menor densidad neuronal en la corteza cerebral (una menor cantidad de neuronas por mm3 de tejido cerebral) en niños con deficiencia de hormona de crecimiento, en comparación con niños que no tienen deficiencia. Por lo tanto, es necesario hacer un diagnóstico oportuno de estos casos e iniciar tratamiento lo más pronto posible.